Redondez nipona. Bienestar corporal y energético.
Que somos seres, actuando en un sin-fin, no nos quepa la menor duda, a ese respecto. Que la meta es la búsqueda, y que hemos de gozar el camino, sea de Santiago, de Roma o incluso de Marathón, también es rigurosamente cierto. Que evolución es disfrute, y por lo tanto, las artes marciales, el juego de Ajedrez, el patinaje artístico y la natación sincronizada, siempre van a estar en boga, no podemos negarlo. Así, pues, el Dolor es la forma más sencilla de aprendizaje, en la Bola de Dragón.
Esa bola, se instituye como terapias alternativas, que buscan el efecto placebo, para provocar euforia, que es una proyección de Amor. Comparable a la Bola de Cristal, según Alaska y Dinarama, los Electro-duendes, la Orquesta Mondragón, los Toreros Muertos o la Bruja Avería. Es decir que hay una Blossom, una Mayim Bialik, una Amy Farrah Fowler, o una neuro-bióloga, que se presta a acompañar a Sheldon Cooper.
De inmediato, nos aproximamos a la Divina Comedia, a través de la Teoría del Big Bang. Porque era otra Bola, ardiente a más no poder, y tan prensada como millones de agujeros negros súper-masivos, que cupieron dentro de una pelota de Golf: ¡ Big Bang / Big Crunch ! Y eso, a nivel humano, obviamente va perdiendo potencia, porque no cabe en la cabeza humana, tanta torsión del espacio y del Tiempo. La Gravedad no es una fuerza, sino una curvatura en el espacio.
Luego por tanto, bástele a cada día, su propio afán. No adelantemos acontecimientos. Seamos unos, grandes y libres, como España. Seamos amigos del astro Sol. Para finalizar, recordarles algunas derivaciones del Santo Grial, que es el Ormus o Manná egipcio, sólo que estas ramificaciones, nos harán gustarnos, porque en la variedad, está el gusto:
a ) Caldo de arroz, en infusión.
b ) Infusión de cáñamo industrial ( Cánnabis Sátiva ).
c ) Infusión de raíz de regaliz.
d ) Y tantas otras frutas y verduras. El escaramujo da desparpajo.
Investiguen y averigüen qué les agrada a ustedes. No está en mi mano, imponer mi criterio. Toda vez que la sosa cáustica, me demostró que, aun sin intencionarlo, puedo meter la pata hasta el fondo. Influir en la gente, ya no me interesa. Porque si voy a contaminar el aire, en mi comarca, para eso, no influyo.
